Guardado y Las fiestas locas mexicanas

    Guardado, uno de muchos

    La selección mexicana tenía una motivación extra para acudir a las concentraciones en los últimos años. Los jugadores convocados salían de fiesta. Aunque si bien que un jugador salga de fiesta y pierda la profesionalidad es un tema difícil de digerir, en la selección mexicana parece estar normalizad gracias a la generación que venía atrás y de la cual fueron referentes personajes como Guardado, Carlos Salcido, Efraín Juárez o incluso Carlos Vela.

     

    La fiesta en hotel de concentración de Monterrey

    El primer caso que sí encendió las alarmas sucedió en Monterrey, después de un partido amistoso en contra de Colombia en 2010. En aquella ocasión, trece jugadores fueron acusados de haber metido a mujeres al hotel de concentración para una fiesta. El cabecilla de aquella “rebelión” fue Carlos Salcido, referente en aquel momento de esa generación contra todo pronóstico

    La copa confederaciones de Brasil y el terma centauros

    Años después, saltaba de nuevo la polémica, la selección mexicana perdía contra Italia en la copa confederaciones y esa misma noche los jugadores eran vistos en un lugar de masajes eróticos llamado Terma Centauros. Pese a que hubo declaraciones de las mujeres y notas de prensa, jugadores como Chicharito Hernandez, Giovani dos santos o Andres Guardado, no tuvieron ningún castigo.

    Rusia

    Antes del mundial, de nuevo saltaban todas las alarmas. Muchos jugadores de la selección se vieron involucrados en un escándalo a causa de una fiesta en la Ciudad de México con mujeres.

    Incluso Hector Herrera tuvo que abanadonar la concentración, ya que la noticia le causó una crisis familiar.

    Confirmación de guardado

    Andrés Guardado, capitán de la selección ha salido recientemente en prensa hablando sobre aquellas polémicas fiestas de forma clara y contundente:

    «Como jugadores no hemos demostrado esa madurez y esa responsabilidad. Somos hasta tontos, nosotros mismos nos hacemos problemas que son innecesarios en todos los sentidos.

    “No necesariamente por ir a un lugar así vas a tomar alcohol, el error es que no somos conscientes de lo que representamos en ese momento y nos prestamos a que se haga polémica, que se dude del profesionalismo, que se dude de la seriedad que se le tiene a la selección y eso si es culpa de nosotros”

    Después de estas declaraciones del capitán parece que la selección mexicana empieza a madurar como grupo ya que critica la forma de actuar del pasado y sienta unas bases más profesionales para el futuro. Veremos si lo que se dice se mantiene en los próximos torneos de la Tri.